2. TIEMPO. Visitas, reuniones, horas y desplazamientos son necesarios durante la planificación. Suele resultar complicado conciliar la organización de la boda con vuestros horarios de trabajo y las obligaciones diarias. A medio plazo el estrés hace de las suyas y la boda acaba siendo un foco de ansiedad en la pareja. No os desgastéis en los preparativos. Dejad que un WP ponga su tiempo en todas las tareas para que vosotros podáis emplear esos meses previos en disfrutar de vuestros amigos y familiares, hacer escapaditas románticas y pasar tiempo juntos sin que la boda acapare toda la conversación.
3. AHORRO. Contratar ayuda puede parecer un gasto innecesario de antemano, pero si te pones a pensar en todo el dinero que vas a invertir en un sólo día, ¿no prefieres asegurar que esa cantidad esté bien empleada? Un buen WP os ayudará a ser realistas con las posibilidades de vuestro presupuesto y se encargará de rentabilizarlo al máximo. Su experiencia le permite conocer y sortear esos agujeros por los que puede colarse un gasto inesperado y siempre encontrará proveedores que se adapten a los cálculos que hayáis previsto para cada partida.
4. PROFESIONALIDAD. No basta con estar a la última en tendencias, hay que saber hacerlas realidad, y para eso es necesario conocer a fondo el sector nupcial. Fotógrafos, floristas, reposteros, estilistas… Rodearse de profesionales de confianza es una parte indispensable del trabajo del WP. Un buen organizador conoce a los mejores proveedores de la zona, pero no tiene acuerdos cerrados con ninguno para que los novios tengan libertad de elección. Eso sí, la calidad estará garantizada.
5. COMODIDAD. Es un hecho. Si queréis decorar espacios o hacer algo especial en vuestra boda sin contar con la ayuda de un profesional, estaréis condenando a amigos y familiares a desplazarse para echaros una mano horas antes de la ceremonia (en el mejor de los casos). En el peor, seréis vosotros mismos quienes tengáis que haceros cargo y, sinceramente, ¿no preferís tener tiempo para disfrutar de los preparativos personales ese día?
6. TRANQUILIDAD. Olvídate de las noches en vela y los nervios de última hora. Cuando contratas a un WP contratas un seguro de confianza. Al llegar el gran día solo tendrás que dejarte llevar y vivir la experiencia junto a los tuyos, porque tu organizador estará a tu lado en todo momento, dándote seguridad y ocupándose de coordinarlo todo hasta que el programa se cumpla punto por punto.